Reflujo laringofaringeo ansiedad
¿Puede la ansiedad provocar síntomas de lpr?
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Robert Burakoff, MD, MPH, está certificado en gastroentrología. Es vicepresidente de servicios ambulatorios del departamento de medicina del Weill Cornell Medical College de Nueva York, donde también es profesor. Fue el editor fundador y coeditor jefe de Inflammatory Bowel Diseases.
La enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) es un trastorno en el que el esfínter esofágico inferior se cierra incorrectamente. El reflujo de ácido estomacal hacia el esófago puede causar acidez y otros síntomas. En Estados Unidos, se calcula que alrededor del 20% de los adultos padecen ERGE.
La ansiedad es una condición de salud mental caracterizada por una preocupación desproporcionada a la situación y que limita el funcionamiento diario. Existen múltiples tipos de trastornos de ansiedad. Se calcula que el 31,1% de los adultos de Estados Unidos sufrirá un trastorno de ansiedad en algún momento de su vida.
Tratamiento más eficaz para el lpr
El reflujo laringofaríngeo (RPL) es un fenómeno que consiste en que el contenido del estómago se devuelve a las zonas situadas por encima del esfínter esofágico superior (incluyendo la cavidad nasal, la boca, la faringe, la laringe, la tráquea y los pulmones).1 La enfermedad por reflujo laringofaríngeo (ERL) es un diagnóstico frecuente en las consultas externas de otorrinolaringología, y su incidencia aumenta año tras año. La atención y la investigación nacionales y extranjeras sobre la ERPL también están aumentando.2 Sin embargo, la patogénesis de la ERPL sigue sin estar clara, ya que es una enfermedad con múltiples factores etiológicos.3
El desarrollo de la era moderna también ha promovido un estilo de vida acelerado. Las personas se enfrentan a más retos y presiones y han reconocido gradualmente el modo de enfermedad fisiológico-psicológico-social en la comprensión de las enfermedades. Cuando la ERPI no puede controlarse durante un periodo prolongado, es decir, cuando los síntomas no muestran una remisión evidente tras el tratamiento con inhibidores de la bomba de protones (IBP) durante 2 meses o más, los trastornos psicológicos son secuelas comunes. En general, son frecuentes los síntomas de ansiedad y depresión. Además, es probable que los pacientes con ERPI presenten molestias torácicas, mareos y otros síntomas de malestar físico sin cambios patológicos orgánicos en los exámenes cardiovasculares y cerebrovasculares.
Quién trata el reflujo laringofaríngeo
Durante el reflujo gastroesofágico, el contenido del estómago y del tracto digestivo superior puede refluir hasta el esófago, más allá del esfínter esofágico superior (un anillo de músculo en la parte superior del esófago), y en la parte posterior de la garganta y posiblemente en la parte posterior de las vías respiratorias nasales. Esto se conoce como reflujo laringofaríngeo (RPL), que puede afectar a cualquier persona. Los adultos con RPL suelen quejarse de que la parte posterior de la garganta tiene un sabor amargo, una sensación de ardor o algo atascado. Algunos pacientes tienen ronquera, dificultad para tragar, carraspeo y dificultad con la sensación de drenaje de la parte posterior de la nariz (goteo postnasal). Algunos pueden tener dificultad para respirar si la laringe está afectada. Muchos pacientes con RPL no experimentan ardor de estómago.
En los bebés y niños, la RPL puede causar problemas respiratorios como: tos, ronquera, estridor (respiración ruidosa), crup, asma, trastornos respiratorios del sueño, dificultad para alimentarse (regurgitación), coloración azul (cianosis), aspiración, pausas en la respiración (apnea), evento aparentemente peligroso para la vida (ALTE) e incluso una deficiencia grave en el crecimiento. El tratamiento adecuado de la RPL, especialmente en los niños, es fundamental.
Lpr o cáncer cómo saberlo
ResumenAntecedentesEl globo faríngeo es frecuente y tiene una baja tasa de curación. Su etiología es compleja y se ha informado de que está asociado al reflujo laringofaríngeo (RPL). Sin embargo, algunos pacientes con globo no presentan ningún síntoma de reflujo ni responden a los tratamientos con inhibidores de la bomba de protones (IBP). El propósito de este estudio fue aclarar los factores de riesgo relacionados de estos pacientes con el objetivo final de mejorar el efecto curativo.MétodosEn este estudio se incluyeron 42 pacientes afectados por el globo faríngeo (grupo G) y 38 pacientes sin globo faríngeo (grupo NG). Según el índice de síntomas de reflujo laringofaríngeo y la respuesta a los tratamientos con IBP, los pacientes se dividieron en grupos con reflujo (G-R, NG-R) y grupos sin reflujo (G-NR, NG-NR). Se realizó una manometría de alta resolución (HRM) para evaluar la motilidad esofágica. Se realizaron cuestionarios que incluían categorías como los factores de exposición a la vida.Resultados
a) La media de las presiones en reposo y residuales del esfínter esofágico superior (UES) en el grupo G-NR fue mayor que en los grupos NG-NR y NG-R (p < 0,05). b) La media de las presiones en reposo y residuales del esfínter esofágico inferior no mostró diferencias entre el grupo G-NR y el grupo NG-NR (p > 0,05). c) La puntuación de la integral contráctil distal esofágica del grupo G-NR no fue diferente de la del grupo NG-NR (P > 0,05). d) En comparación con el grupo NG-NR, el grupo G-NR mostró una mayor incidencia de estrés, tabaquismo, consumo de alcohol, alto nivel de sal y ansiedad (P < 0,05).ConclusionesEl globo faríngeo sin LPR puede producirse debido a la elevada presión del EEE. El estrés, el tabaquismo, el consumo de alcohol, el consumo elevado de sal y la ansiedad pueden ser sus factores de riesgo.